abril 16, 2009

Insatisfecha.

Ni la más sutil de las metáforas,
ni la rima más intrincada,
ni siquiera una eufórica ironía
satisface mi deseo.

La ingeniosa fantasía,
escurridiza como el tiempo mismo,
ha sentado precedente,
y hecha raíces
alimentándose de la contradicción.

No vale la pena esforzarse
cuando la voluntad desfallece,
ante una sádica promesa,
y una sonrisa inconsciente
vaga sin destino
hacia su muerte...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Permite a tu mente desvariar un poco...