Quiero decirle adiós,
en esta noche vacía.
Quiero dejar desangrar,
cada ridículo error.
Antes de que regrese la luz,
voy a maldecir una vez más
la repugnante fantasía
de tenerte cerca
que me persigue,
y me atormenta
con imperdonable claridad.
Haré inventario del tiempo,
de las palabras,
de las insuficientes caricias,
de las incontables heridas.
Para quemarlo y dejarlo esfumarse
al igual que se esfumaba tu sonrisa
al mirar atrás.
Y murmuraré mis secretos
a la amante oscuridad,
que me abriga esta noche,
para escapar de mi pecado,
para poderte olvidar.
a olvidar... siempre llega un momento en que uno dice, hasta aquí, suficiente tiempo se ha llevado ese sentimiento, esa carga, esa cosa... recordar una última vez para luego dejarlo ir...
ResponderEliminar;) besitos y abrazos!!!
Dejarlo ir... esa es la meta. Muchas gracias por tu comentario, cada palabras, y cada huella que dejan en este espacio lleno de incoherencias, es para mi invaluable. Saludos!!
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